Cada colección de Valdespino es heredera de un linaje vitivinícola centenario.
Fragmentos de arte e historia.
El origen del concepto
“Single Vineyard”
Pura
Intesidad.
Variedad: 100% Palomino Fino.
Alcohol: 15º
Edad Media: 6 años.
Esta manzanilla lleva ímplicita la suave frescura del océano Atlántico y del río Guadalquivir. La uva con la que se elabora proviene fundamentalmente del Pago de Miraflores, uno de los pagos costeros sanluqueños más emblemáticos. Su única saca anual procede de botas seleccionadas de la solera de la emblémática Bodega de Misericordia, situada en el barrio alto de Sanlúcar de Barrameda y se realiza en primavera, momento donde la Flor se presenta más activa que en otras estaciones.
Apreciado
en todo tipo
de mercados.
Variedad: Amontillado y Pedro Ximénez.
Alcohol: 18º
Edad Media: 15 años.
Es un vino de cabeceo cuya elaboración se realiza combinando amontillado de las soleras más exclusivas de Valdespino y Pedro Ximénez. El vino base al ser un amontillado pasa por una crianza biológica y posteriormente oxidativa, dando como resultado un vino muy agradable al paladar, sedoso y de gran personalidad.
Variedad: Moscatel de Alejandría.
Alcohol: 17º
Edad Media: 4 años.
Promesa es un vino dulce absolutamente equilibrado elaborado con uva 100% moscatel, cultivada en los suelos arenosos de la costa Atlántica. Se obtiene a partir de la sobremaduración de la uva, posteriormente envejecida en el sistema tradicional de solera y criaderas en botas de roble americano. Compartir origen con Moscatel Toneles, reconocido por sus 100 puntos Parker, lo convierte en un moscatel que sin duda promete.
Demasiado bueno para no estar
bajo llave.
Variedad: Pedro Ximénez
Alcohol: 17º
Edad Media: 5 años.
El Candado proviene originariamente de dos botas seleccionadas que se mantuvieron bajo llave como reserva familiar antes de constituir su centenaria solera. De ahí recibe su singular nombre. Es un vino dulce único que se obtiene a partir de uva Pedro Ximénez sometida al proceso tradicional del “asoleo” para lograr una intensa pasificación del fruto. Después del prensado y la fermentación, se somete a una larga y cuidadosa crianza en bota de roble que garantiza su calidad y finura.
Cada colección de Valdespino es heredera de un linaje vitivinícola centenario.
Pura intensidad.
Esta manzanilla lleva ímplicita la suave frescura del océano Atlántico y del río Guadalquivir. La uva con la que se elabora proviene fundamentalmente del Pago de Miraflores, uno de los pagos costeros sanluqueños más emblemáticos. Su única saca anual procede de botas seleccionadas de la solera de la emblémática Bodega de Misericordia, situada en el barrio alto de Sanlúcar de Barrameda y se realiza en primavera, momento donde la Flor se presenta más activa que en otras estaciones.
Variedad: 100% Palomino Fino.
Alcohol: 15º
Edad Media: 6 años.
Apreciado en todo
tipo de mercados.
Es un vino de cabeceo cuya elaboración se realiza combinando amontillado de las soleras más exclusivas de Valdespino y Pedro Ximénez. El vino base al ser un amontillado pasa por una crianza biológica y posteriormente oxidativa, dando como resultado un vino muy agradable al paladar, sedoso y de gran personalidad.
Variedad: Amontillado y Pedro Ximénez.
Alcohol: 18º
Edad Media: 15 años.
Las promesas están para cumplirlas.
Promesa es un vino dulce absolutamente equilibrado elaborado con uva 100% moscatel, cultivada en los suelos arenosos de la costa Atlántica. Se obtiene a partir de la sobremaduración de la uva, posteriormente envejecida en el sistema tradicional de solera y criaderas en botas de roble americano. Compartir origen con Moscatel Toneles, reconocido por sus 100 puntos Parker, lo convierte en un moscatel que sin duda promete.
Variedad: Moscatel de Alejandría.
Alcohol: 17º
Edad Media: 4 años.
Demasiado bueno
para no estar
bajo llave.
El Candado proviene originariamente de dos botas seleccionadas que se mantuvieron bajo llave como reserva familiar antes de constituir su centenaria solera. De ahí recibe su singular nombre. Es un vino dulce único que se obtiene a partir de uva Pedro Ximénez sometida al proceso tradicional del “asoleo” para lograr una intensa pasificación del fruto. Después del prensado y la fermentación, se somete a una larga y cuidadosa crianza en bota de roble que garantiza su calidad y finura.
Variedad: Pedro Ximénez
Alcohol: 17º
Edad Media: 5 años.